¡Llama a la comadrona! es una historia sencilla (y autobiográfica) de una joven Jenny Lee, que acaba en un convento ejerciendo de comadrona para completar su formación como enfermera. Ella no sabe que la han destinado a un convento y en una zona tan humilde y tocada por la guerra como puede ser el East End de Londres en los difíciles años 50. Jenny es una chica de buena familia y le impacta ver en que situación se encuentra gran parte de la zona y hará todo lo posible para adaptarse.
A lo largo de los episodios veremos como poco a poco se adapta al entorno y su bondad y compasión irán siempre por delante sea cual sea la situación. Jenny no estará sola, en el convento Nonnatus, allí estarán sus compañeras comadronas y las monjas que regentan el lugar, (cada una con una personalidad muy marcada y que hará reír a más de uno).
No nos encontramos delante de una serie dramática en toda su duración, cada capítulo nos aportará muchos sentimientos a la vez, la ternura y la ingenuidad de los personajes, el carácter de las madres a la espera de sus hijos en cada caso serán distintos y delante de todo, el encontrarnos delante de una serie de una duración de casi 60 minutos que no aburre.
No tengo mucho más que añadir sobre la serie, solamente que le echéis un vistazo a una serie que promete ser una revelación en España (tal como hizo en Inglaterra, su país de origen).
Simplemente, una delicia.